Propiedad Intelectual: Protegemos el valor de tus ideas y creaciones

Porque el registro te da el derecho exclusivo a usarla en todo el territorio argentino. Impide que otros la usen y te permite construir un activo valioso para tu negocio, que incluso podés vender o licenciar en el futuro.

Una marca protege la identidad de un producto o servicio (un nombre, un logo). Los derechos de autor protegen una obra creativa original (un libro, una canción, una foto, el código de un software).

El proceso ante el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI) puede demorar entre 12 y 18 meses, si no surgen oposiciones de terceros. Sin embargo, una vez iniciada la solicitud, ya contás con un derecho en expectativa.

El primer paso es enviar una intimación formal (carta documento) exigiendo el cese de uso. Si no da resultado, se pueden iniciar acciones de mediación y, en última instancia, un juicio por cese de uso y daños y perjuicios.

No, las ideas en sí mismas no se pueden registrar. Lo que se protege es la forma en que se expresa esa idea. Por ejemplo, no podés registrar la idea de escribir una novela de detectives, pero sí podés registrar tu novela ya escrita (derechos de autor).

Una marca registrada en Argentina dura 10 años. Pero, a diferencia de otros derechos, puede ser renovada indefinidamente cada 10 años, siempre que se siga utilizando.

Ocurre cuando un tercero, que considera que tu marca es similar a la suya y puede generar confusión, se opone a tu solicitud de registro. Es una etapa de negociación y defensa que requiere asesoramiento legal.

Sí, claro que pueden. El derecho de autor no protege el tema o la idea, sino tu expresión original de ese tema: tus palabras, tu estructura, tus personajes. Nadie puede copiar tu libro, pero sí escribir otro sobre el mismo asunto.